jueves, 29 de octubre de 2009

Presentaciones

  • Mujer: Se centran en el papel de la mujer en la Edad Moderna, especialmente a lo largo del siglo XVI. La mujer estaba relegada de la sociedad a ser “madre de”, o “mujer de”. La historiografía del siglo XX va a seguir negándola hasta los ’70, época en la que comienzan a escribir las primeras historiadoras feministas y cuestionan todo lo anterior. Se acepta que estos estudios estarán enfocados hacia el feminismo, problemática con la que contará el grupo.
  • Carlos V: Se busca acercar a Carlos V a la actualidad, analizando su figura histórica en el Imperio y en Europa. La historia de su vida está relacionada con la de la Europa del momento: hijo de Juana la Loca y Felipe el Hermoso, nieto de los Reyes Católicos, del emperador Maximiliano… La trayectoria nefasta de sus padres y su educación católica condicionan su vida y su gobierno. Planea defender una Europa amenazada por la religión.
  • Francia: Pretende acercarse a Francia, país vecino y enemigo de España por esta época en la lucha por la hegemonía. Énfasis en su monarquía y en la Guerra Civil, centrándose en cada rey y en la guerra civil.
  • Reforma: Quiere resaltar los motivos de la reforma y su cambio a la gente de a pie, además de ser un duro golpe para la Iglesia. Se centrarán en la vida de Lutero, en los fallos de la Iglesia y la contestación luterana, y en la repercusión y descripción de estos acontecimientos por el arte.
  • Guerras de Italia: Se centra especialmente en las guerras, tanto entre reyes de la zona, como con relaciones exterior (Aragón, enemiga; Castilla, aliada; Francia, ayudada por éstos en la Guerra de los Cien Años). Se resaltan estrategias militares, pero también descripción sobre geografía, política, religión, economía…
  • Inglaterra II: Ruptura total con Roma por parte de Isabel I. Será la mayor competidora de España. Se centrarán en política, economía, religión y en la figura de Guy Fawkes, católico que intenta hacer explotar el Parlamento inglés. Queda en el aire si tratarán o no la pugna de Isabel I con su prima católica María I, reina de Escocia.
  • Contrarreforma: Se busca entender causas y consecuencias de la Contrarreforma. Inicio resaltando los aspectos de la Reforma y la convivencia de ambas. Institucionalización de la Iglesia, incidiendo en los temas criticados para dar una solución conforme a la Iglesia primitiva en la que todos creían. Se relatará el Concilio de Trento, los problemas con la Biblia, las críticas internas contra la manifiesta corrupción, las nuevas órdenes (jesuitas, capuchinos, mendicantes, franciscanos). Problema con la bibliografía: muy subjetiva, de teólogos de ambos bandos.
  • Descubrimientos: Principalmente sobre las relaciones América hispana – España. También sobre el Norte de América y las demás potencias que están en la zona. Asia y África. Siempre se centra en las relaciones de estas zonas con Europa.
  • Flandes: Historia relacionada con España. Difícil bibliografía, al juntarse el tema de Flandes con otros temas. Tratarán política (Felipe II), religión (problemas con los Papas, influencias protestantes), guerra (Tercios de Flandes, Duque de Alba), arte (Rembrandt, Rubens), sociedad y comercio.
  • Sociedad: Se centrará en la desigualdad (estamentos; privilegiados y no privilegiados) y en la repercusión de guerra, peste, hambre… Puede que también en la demografía.
  • Renacimiento: Influencia medieval y su repercusión en la Edad Contemporánea. Vital tratar el Humanismo. Concepto y características. Desarrollo y evolución. Reseñas de obras (Maquiavelo). Arte, dividido en Quattrocento (Mecenazgo de los Médicis), Cinquuecento (Miguel Ángel; competitividad entre el Papa y los Médicis) y Manierismo (pleno Miguel Ángel y discípulos). Visión del Renacimiento y concepto (cuántos hubo antes y después).
  • Religión y política: Centrarse en la influencia en la Historia. Sin bibliografía concreta; muy escasa. También influencia de la religión en los descubrimientos. Énfasis en la política exterior de Carlos V y Felipe II, como estandartes defensores del catolicismo. Influencia de Lutero (profundo visionado de la película).
  • Oriente: Se deja de lado comúnmente en los planes de estudios, por lo que este grupo pretender llenar ese vacío. Tratarán un prefacio (dominio del Imperio Mongol, ocupando casi toda Asia, hasta revueltas a independentismos internos. División de temas:: China (dinastías Ming y Qing), Turquía (Imperio Otomano, su expansión, decadencia y relaciones con Europa), India (Sultanato de Delhi y del Sur), Rusia (Desde Iván IV, primer zar, hasta los Romanov) y Japón (periodo de dinastías hasta los Meiji).

martes, 27 de octubre de 2009

La Economia en la Edad Moderna

1-Características Generales
A principios de la edad moderna la agricultura era la actividad económica mas importante y en la que mayor numero de personas trabajaba.La agricultura era de bajos rendimientos y permitia poco mas que la subsistencia.
Las rutas comerciales en la edad moderna eran mayoritariamente marítimas porque las rutas terrestres por varias razones entre ellas la mayor capacidad de carga de un barco frente a una mula o un carro, por la mutlipicidad de fronteras, aduanas y peajes que conllevaba el pago cada vez que pasases por uno encareciendo el producto que mediante el transporte marítimo se evitaba y por la situación de la red viaria que aunque mejoras en esta época sigue estando en malas condiciones añadiéndose a la acoso de los bandoleros cuando vas por ellas.Esto hacia que fuera mas rentable el transporte marítimo a pesar de estar expuesto a ataques de piratas y hundimientos.
Aunque en la Moderna el autoconsumo y el trueque sigue existiendo se impone para la realización de intercambios la moneda que facilito los intercambios


2-El sector primario
Agricultura
La agricultura era la actividad economica en la edad moderna y la que ocupaba a un mayor numero de población ( entre el 80% y el 90%).
La evolución de las técnicas de labranza entre la Edad Media y la Moderna es casi nula . Aunque en la edad moderna se produce un aumento de la producción, no de la productividad de la tierra,
que se debe casi exclusivamente al aumento de la superficie cultivada ocupando terrenos abandonados y áreas marginales.
Aunque se introducen nuevos productos como la patata y el tomate el producto mas cultivado sigue siendo los cereales( trigo, centeno,avena).
Para el cultivo se sigue necesitando que una parte de la tierra quede en barbecho entre otra causas por la ausencia de abonos a exención del estiércol de los animales de ganado lo que provocaba la llamada ley rendimientos decrecientes que debido al agotamiento progresivo de la tierra provoca que la tierra cada vez produzca menos y que se necesite mas horas de trabajo para sacar rendimientos.Dos de los métodos utilizados para el cultivo en la edad moderna fueron:
- Año y vez
Que consistía en dividir la parcela en dos en una se cultiva y en la otra se deja en barbecho utilizándola para que el ganado paste comiéndose los hierbajos mientras fertiliza la tierra de forma natural para que la tierra se recupere y al año siguiente dejar la parte cultivada en barbecho y viceversa. A pesar de dejar la tierra un año sin cultivar los rendimientos son cada vez menores por el agotamiento de la tierra,como ya he dicho antes.
-Sistema Norfork o de cuatro hojas
Se implanta en Inglaterra en el siglo XVIII.Consiste en la división de la parcela en cuatro partes plantando en la primera cereales en la segunda nabos, en la tercera plantas forrajeras y en la cuarta cebada rotandola cada año eliminando así el barbecho.


Características del cultivo según las zonas:
-Europa Mediterranea
Predomina la agricultura extensiva de secano con predominio del cereal basada en la rotación
trienal.
Es una agricultura atrasada dependiente de los ciclos de rotación trienal que dejaban amplias zonas en barbecho y de bajos rendimientos
-Inglaterra y Paises bajos
Agricultura mas avanzada.
en Inglaterra se produce el cerramiento de campos, enclosure, que lograba una asociación mas eficaz entre agricultura y ganaderia.
En los Países bajos se drenan una importante cantidad de agua al mar para convertir esa zona anteriormente insudada en cultivable
-Europa Central
el cereal era el cultivo principal seguido del de vid cultivado en las cuencas del Rin y Main.
Al oeste de Elba el campesino era libre en el este sigue perteneciendo al señor feudal.
En la zona Baltica predomina la agricultura extensiva de cereal

domingo, 25 de octubre de 2009

La Demografía en la Edad Moderna

1.-Características Generales:

La demografía (de demos, pueblo, y grafos, escritura) es la ciencia que estudia los cambios poblacionales del ser humano. La Edad Moderna posee unas estructuras muy estables, de pocos cambios, pero no inmóviles. Hay momentos de expansión (A) y recesión (B). Es una demografía de tipo antiguo: Alta Natalidad y Alta Mortalidad a la vez, creando una pirámida de población con algunos saltos, lo denominado "mortalidad catastrófica". La natalidad se halla en el 40 por mil y la mortalidad en el 35-40 por mil. Hay una leve tendencia al crecimiento vegetativo, cuyo avance destruido por las comentadas catástrofes demográficas, producidas principalmente por hambre, peste y guerras. La esperanza de vida es corta, en torno a 40 años. Pero hay que tener en cuenta la elevada mortalidad infantil, que hace disminuir la estadística. Por tanto, en la realidad, las gentes podían vivir hasta los 60, con casos de personajes extremadamente longevos; de lo que no hay duda es de que el envejecimiento se producía antes que ahora. Además de esto, tiene lugar una clara tendencia al crecimiento urbano, especialmente a partir del siglo XVII, que va a condicionar el comercio y la industrialización. Los países propicios para ello, dada la tendencia comerciante y mercantil, son principalmente Holanda (donde en 1609 se inaugura el Banco de Amsterdam) e Inglaterra (donde se crea la Bolsa de Londres), es decir, la Costa Atlántica, la que da al Nuevo Continente.

En el siglo XVI se calcula que hay 461 millones de habitantes en el planeta: las cifras barajadas nos hablan de una evolución positiva de la población mundial, con un crecimiento anual acumulativo apreciable para la época, pero también de algunas diferencias significativas. El continente más poblado es Asia, donde se concetra la mitad de la población mundial y se registra un mayor crecimiento; el segundo es África, seguido de Europa; América es la excepción a este crecimiento, cuya población se ve drásticamente reducida debido a la llegada de los europeos y de las enfermedades nuevas contra las que no tienen defensas biológicas. Dentro de Europa, Francia estaba a la cabeza, seguido de Rusia, y el I.Otomano, que se expandió por los Balcanes pasando de 9 mill. de habitantes a 28 mill. a resulta de su expansión territorial. Después están Italia y Alemania, España, Inglaterra y Portugal. Esto son estimaciones de la población europea durante este siglo, pero cabe decir que no fue homogénea ni a lo largo del periodo ni entre las distintas regiones. El impacto de la expansión turca, las guerras de Italia... todo esto hizo que las distintas regiones europeas evolucionaran de distinta manera, pero, con carácter general, también está documentado la ralentización del crecimiento a fines de siglo debido a una desaceleración económica

La población aumenta en el XVII en Europa, ya que el rechazo al concepto de "crisis general" ha permitido apreciar mejor la complejidad de la evolución demográfica en este siglo. Más que un retroceso general, lo que se produjo fue la finalización de la etapa de intenso crecimiento que había conocido el continente la centuria anterior, experimentando un crecimiento muy reducido que, al interrumpir la tendencia claramente alcista anterior, configurará una nueva fase caracterizada por el estancamiento. Sin embargo, este rasgo general no refleja la verdadera dimensión de un proceso demográfico cuya evolución fue diversa, tanto geográfica como cronológicamente, lo que modificó la distribución de la población y alteró los antiguos equilibrios. El cambio de la coyuntura demográfica se produjo de forma escalonada ya que las dificultades que se experimentaron en cada periodo tuvieron un impacto muy desigual en los diversos territorios europeos. Las primeras manifestaciones se dieron con el estancamiento de la producción agraria a fines s.XVI y principios s.XVII, con malas cosechas y epidemias ("peste altántica" 1596-1603), aunque tras superar esto la población siguió creciendo con distinta intensidad en casi todos los territorios, exceptuándo los países mediterráneos. La Guerra de los Treinta Años supuso la extensión de las dificultades a la mayor parte de Europa, especialmente intensa las pestes que asolaron los países mediterráneos entre (1647-1652) y zona noroccidental del continente (1665-1667), destacando también los efectos de la guerra del norte en el área báltica y Europa oriental, que finalmente afectaron también a Francia a finales de siglo. Estas circunstancias determinaron una evolución muy diferente en cada territorio: retroceso brutal en europa centro-oriental en una sola etapa (Alemania 33% poblac. rural y 44% poblac. urbana), en los países mediterráneos la crisis se produjo en dos etapas, finales s.XVI y mediados s.XVII, y la mayor divergencia se produjo en los países del noroeste de Europa, donde la población creció intensamente en la primera mitad de la centuria (Inglaterra, Escandinavia y Países Bajos). Si la población creció ligeramente en Europa a lo largo del siglo fue sin duda por el dinamismo de esta última área mencionada. El desigual impacto de las dificultades favoreció el desplazamiento del equilibrio demográfico basculando su centro de gravedad del Mediterráneo hacia el Atlántico. En el interior de los países se produjeron procesos similares, iniciándose la inversión del equilibrio entre el centro y la periferia, destacando el crecimiento de los lugares de residencia de los reyes y las ciudades portuarias del Atlántico debido a una redistribución de la población urbana en favor de las ciudades de mayor tamaño y ubicadas en la costa altántica, lo que condujo a la configuración de un sistema urbano más integrado y cuyo liderazgo fue ostentado por las ciudades del noroeste de Europa, donde se ubicaron las metrópolis más importantes




En el s.XVIII, el aumento de población no fue debido a ningún cambio sustancial en el régimen demográfico, la tecnología sanitaria disponible hasta finales del s.XVIII no permitió reducir sustancialmente los niveles de mortalidad ordinaria, ni adulta ni infantil, el tiempo que la nupcialidad siguió teniendo la principal responsabilidad en el ritmo demográfico, es decir, no podemos hablar de ninguna revolución demográfica o inicio de transición demográfica en esta centuria. El crecimiento demográfico europeo estuvo basado más bien en una mejora constante de las perspectivas de vida, todavía limitadas y que no se extendieron por igual en Europa, aunque permitieron mantener una prolongada fase de crecimiento demográfico que se mantuvo de 1720-1780. Elementos clave de esta demografía fueron la desaparición de las hambrunas en los países con mercados más regulares y mejor abastecidos, o lo que es lo mismo, el crecimiento demográfico estuvo ligado al grado de integración de las economías europeas. Lo mismo ocurrió con las epidemias y enfermedades contagiosas, y no por la mejora sustancial de los niveles de supervivencia en general, sino por lo logros en la difusión de medicamentos, que aunque ya conocidos, ahora eran mejor distribuidos y aplicados debido a la labor promotora de un sistema de enseñanza mejor articulado y a los apoyos de los poderes públicos. Los tímidos avances sobre la mortalidad hay que buscarlos en el propio desarrollo económico, que permitieron una mejor y mas variada alimentación. La legislación fue el remedio más efectivo y su mayor éxito radica en la reducción de las crisis de mortalidad mediante unas estructuras administrativas a través de las cuales se pudo articular una primigenia política sanitaria. Pero cabe destacar, que se estaba muy lejos de acabar con este tipo de crisis, agravadas a finales de siglo debido al tambaleamiento de los poderes públicos y la recesión de la economía.
Las diferencias demográficas regionales europeas aumentaron en este siglo. La geografía demográfica heredada había puesto de manifiesto la importancia del medio ambiente: el clima acentuaba meridional acentuaba la mortalidad infantil y ésta forzaba una nupcialidad más intensa, pero dejaba un menor crecimiento vegetativo; el climade regiones septentrionales aumentaba los niveles de superviviencia infantil, favoreciendo matrimonios más tardíos y mayor cuidado de los hijos. A lo largo de este siglo las diferencias regionales no variaron, y la mejora en las perspectivas de vida no vino por el aumento sustancia en los salarios, sino por un notable incremento de los niveles de empleo y renta familiar. La urbanización contribuyó de forma significativa a este aumento, aportando la ciudad elementos positivos que tienen que ver con el aumento de oportunidades de trabajo, pero a su vez, la ciudad fue estimulada en su crecimiento por la atracción hacia los núcleos urbanos de los poderes políticos, sociales, económicos... la ciudad aumento las necesidades de servicios, oportunidades para estos habitantes que emigraban desde el medio rural.

2.-Fuentes para el estudio

Estimar la población del quinientos y sus características tiene sus evidentes dificultades por los problemas que presentan las fuentes, y más aún, por la falta de fuentes adecuadas. Estamos en lo que se ha llamado la época protoestadística, pero en sus inicios, es decir, que contamos con fuentes susceptibles de una elaboración estadística para el análisis de la población, aunque ésta no fuese su intención original al haber una finalidad de recopilación únicamente militar y fiscal, no para el estudio de la demografía, pero son insuficientes en número, calidad y poco fiables para responder a las cuestiones que se plantean, con información inconexa e imprecisa y muchas veces hay que rellenar vacíos con imaginación. Aparte de fuentes de índole cualitativa, insustituibles para determinados tipos de análisis, dos son las que destacan:

- Recuentos de población, es decir, censos (listas de vecinos, 4 personas aproximadamente por cada vecino; realizados en Nápoles (1508), Venecia (1509), Roma (1526), Francia (1503), Castilla (1587); los primeros censos individuales modernos fueron en Aranda (1768), Holanda (1740), Suecia (1764), Dinamarca (1766) o el Censo de Floridablanca (1786); con éstos ya hay posibilidad de calcular o realizar gráficos, pirámides, densidad…) y empadronamientos (nómina de vecinos o moradores de un pueblo realizados en Prusia (1714), España (1717) y el Catastro del Marqués de la Ensenada, 1753, para conocer mejor Castilla). Se aprecia el aumento y querencia de control por parte del Estado y empadronamientos, normalmente vecindarios en sus distintos tipos, que nos informan del volumen y la distribución de los efectivos en un momento dado. La práctica de realizar vecindarios se generaliza progresivamente desde unas primeras realizadas en Italia y en íntima relación con las nuevas formas de hacer política de los nacientes estados modernos y el paralelo desarrollo de sus estructuras administrativas. Los tratadistas de la época insisten en que el conocer la población y sus características con la mayor precisión posible es fundamental para la acción del gobierno (Maquiavelo, Bodín...). Cabe destacar que los vecindarios están siempre bajo sospecha, ya que se elaboran con intenciones fiscales, lo cual provoca que a veces no se registre los exentos y que haya un intento constante de ocultar el número de vecinos para disminuir la tributación que de él podía resultar.

- Registros sacramentales reunidos en los quinque libri, lo cuál constituye la "más masiva de las fuentes de los pueblos" (P.Goubert), aunque no se generalizaron hasta las últimas décadas del periodo, pues la obligatoriedad de los mismos entre los católicos no se establecerá hasta 1563, en el Concilio de Trento. Tipos de libros:

- De bautismo: Anteriores a Trento. Sólo se recoge a los que llegan a ser bautizados.

- De matrimonio: Oficiales con Trento. Difíciles de ocultar por el control del clero sobre los matrimonios. A veces, tenían lugar negligencias por parte del párroco.

- De defunción: A partir de 1614. Con ocultaciones y falta de minuciosidad. A veces hay duplicaciones (en hospital y parroquia) que inducen a la confusión. Además, no se contabilizan las defunciones de pobres y se colapsan durante epidemias.


2.1-Natalidad:

Una característica de la población es su alta natalidad: su porcentaje es 35-45 niños por cada mil habitantes, aunque existen excepciones. Hay que decir que nos encontramos en una sociedad donde no se practica un control del nacimiento generalizado y efectivo, se conocía medias anticonceptivas y existe una altísima natalidad ilegítima, especialmente en la ciudad dado el anonimato que produce el alto número de población de las urbes (los hijos ilegítimos tuvieron duras dificultades para subsistir allá donde se movían, pues eran marcados de nacimiento). La Iglesia condenaba la practica de estos métodos anticonceptivos, y el recurso a los mismos parece excepcional, pero eso no quiere decir que estemos ante "una fecundidad natural, pues múltiples valores tanto culturales (grado de cumplimiento de los preceptos religiosos...) hasta biológicos (estacionalidad, abarca la primavera, por el relajamiento de la moral en la Semana Santa, y otoño, tras el duro verano de trabajo agrario), llegando a subalimentación o tabúes sexuales. Pocas son las reconstrucciones de familias realizadas en s.XVI, ya que los datos que tenemos son posteriores, antes de que se iniciase el control del nacimiento, por lo que se establece entre 350-500 hijos al año por cada mil mujeres casadas entre los 20-24 años (se tenían 4 o 5 hijos por familia, sin contabilizar los frecuentísimos abortos), número que desciende primero de forma progresiva hasta los 30 y después de forma pronunciada hasta llegar a que no se tienen a partir de los 45 años.

A lo largo de los siglos porteriores aparecieron nuevos comportamientos demográficos que condujeron a una reducción consciente de la natalidad. Más que a través de la difusión de prácticas anticonceptivas, el proceso derivo de los comportamientos matrimoniales. El celibato desbordó el ámbito eclesiástico, y la edad de matrimonio se retrasó bastante, consolidándose en Europa el matrimonio tardío, inducido probablemente por las dificultades económicas, de ahí que el fenómeno no se produjese en aquellas áreas en las que la industria rural tenía o había alcanzado cierta difusión. Pero para el conjunto de la población, tampoco debe descartarse, junto a la falta de oportunidades de trabajo, que el retraso del matrimonio no obedeciese al deseo de gozar de un mejor nivel de vida.

2.2-Nupcialidad:

Su porcentaje es de 11-15 por mil, bastante algo. Los mínimos estacionales se producían en cuaresma y navidades (por ser momentos de ferviente religiosidad) y verano (pro ser época de duro trabajo en el campo). El divorcio no existía. En caso de viudedad, podían tener lugar unas segundas nupcias. Éstas eran mejor vistas en el caso del hombre, pues era el elemento engendrador de la sociedad patriarcal del momento; la mujer se quedaba encerrada en casa, vestida de negro, guardando luto por su difunto marido. El celibato era frecuente en los religiosos, especialmente en los católicos. También había cierta cantidad de gente que no se casaba, siendo malmirada por la sociedad, que llegaba a acusarla de brujería (especialmente cuando se trataba de mujeres). Hay que tener en cuenta que en este momento el matrimonio no se concebía como amor entre dos personas, sino como un acuerdo político entre familias o individuos para repartir bienes. Un elemento influyente fue también la emigración a América, a donde muchos europeos masculinos varones fueron en busca de hallar parejas y formar allí su familia, restando a la demografía del Viejo Continente.

Hay establecido un debate sobre el origen y consecuencias de un modelos europeo de matrimonio de cuya singularidad hablo Malthus. En la Europa occidental un número importante de mujeres nunca se casaba y las que contraían matrimonio lo hacían a edades superiores a los 25 años, por lo que se supone que se habría adoptado un freno preventivo al crecimiento de la población que permitiría mantener éste por debajo del límite que imponían los recursos disponibles. Por el contrario en el resto de lugares la norma era el matrimonio universal apenas superaba la pubertad. Según este modelo, el límite oriental estaría en una línea imaginaria entre Trieste con Leningrado (sin quedar clara la situación de Irlanda católica, España e Italia, cuyos datos aportan la existencia de un matrimonio mediterráneo). Además, queda la duda de que si en el s.XVI estas mencionadas características definían al modelo plenamente o era algo en vías de desarrollo.
Para el autor P.Chaunu, el modelo europeo de matrimonio se afianza a mediados de este siglo en las áreas que se encuentran a la cabeza de la evolución: la sociedad del momento, antes que enfrentar penurias adoptó uno de los posible frenos preventivos (Malthus), lo que significa una revolución demográfica con la implantación de este modelo, que pondría en manos de las sociedades el control sobre el crecimiento demográfico. Los resultados confirman esto pero con algunos matices, como por ejemplo tenemos datos de los grupos privilegiados, que caracterizan a este modelo, con casamientos de las mujeres de 25-26 años. Otros estudios nos hablan de edades más tempranas que apuntan a un matrimonio todavía relativamente precoz en algunas zonas (entre 22-19 años). Las diferencias registradas han obligado a introducir ciertas matizaciones y a plantearse nuevos problemas: la relación entre las características de la nupcialidad y la estructura del grupo doméstico, con las pautas de residencia y con las prácticas de transmisión de bienes.

2.3-Mortalidad: A fame, peste et bello, libera nos Domine

Estamos ante sociedades que registraban una alta natalidad aunque también una alta mortalidad, de modo que nos encontramos ante un crecimiento natural acumulado durante años pero que se vería repetidamente comprometido por la periódica presencia de sobremortalidades.
Existen fuertes diferencias en los niveles de natalidad y aún más de mortalidad entre distintas sociedades o incluso localidades, por lo que estas diferencias no siempre estamos en condiciones de explicarlas adecuadamente.
El temor de la sociedad de esta época a las sobremortalidades llegaba hasta el punto de desestructurarla, las autoridades abandonaban sus responsabilidades, huida de los religiosos... Encontramos dos tipo de mortalidad:

Catastrófica: consiste en un aumento de la mortalidad durante un período breve (200, 300, 400 por mil). Asemejada a los tres de los Jinetes del Apocalipsis

- Hambre (fame): es imposible determinar la veracidad de algunos de los testimonios llegados hasta nosotros. La muerte por pura inanición puede que no fuese frecuente, salvo en momentos excepcionales o en áreas marginales, pero la conciencia de que existía una relación entre el hambre y el aumento de la mortalidad esta muy presente. Varias teorías a lo largo de los años, destacando las de Jean Meuveret, Pierre Courbet o Peter Laslett, están algo desfasadas, ya que las mortalidades debidas a inanición solo se manifestaban en regiones monocultivo cerealístico incomunicadas, y aun mas se discute en estos casos la autentica responsabilidad de las hambrunas, ya que estas venían acompañadas de epidemias, y aunque hay relaciones entre hambre, epidemia y mortalidad, la hambruna como causa inmediata ha perdido protagonismo

- Peste: la enfermedad más mortal es la peste, traída de Asia en el sigloXIV con la yersina pestis, bacteria de la pulga de la rata, que pasa al hombre con la mordedura de la rata o el insecto. Hay brotes periódicos, especialmente en las dos estaciones, en verano (por la diarrea) e invierno (enfermedades pulmonares). Mata en cuestión de dos o tres días, una semana a lo sumo. Existen dos tipos de peste, y contraer cualquiera o ambas es casi un 100% mortandad

- Negra o bubónica: Salen bubones (granos morados grandes y malolientes) en varias partes del cuerpo. Tiene un 50% mortandad e incide sumamente en verano.

- Pulmonar: Produce serios problemas respiratorios. Tiene 80-90% mortandad e incide principalmente en invierno.

Es la principal causa de la alta mortalidad hasta que es controlada a mediados del s,XVII tras un último brote grave en Marsella (1719). Las más graves epidemias sucedieron en 1522, 1564, 1580, 1586 y 1599. Las fuentes a veces son claras y otras no permiten distinguir entre peste y pestilencia, nombre genérico dado a cualquier enfermedad epidémica. Las perdidas que podemos documentar es una u otra ocasión son enormes y su reiteración agrava su impacto. Es difícil ofrecer cifras con fiabilidad pues los registros son insuficientes especialmente cuando se esta dando, ya que la población huía. Aún con estas limitaciones, los datos suelen buscar transmitir las enormidades de las pérdidas (su porcentaje de mortalidad es de 35-40 por mil), pero sin generalizar, siendo fácil documentar las mortalidades más a nivel regional (Milán 1523, 50.000 víctimas; Nápoles 1528-1529, 65.000 muertos…). Ofrecer estimaciones para territorios más amplios supone realizar cálculos difíciles de ajustar, pero razonables.
Ante la peste, la medicina de la época era inútil, así como los remedios curativos tradicionales (triaca magna, vinagre de los cuatro ladrones, piedra besar). Cabe hablar de algunos avances de la misma, pero no en el tratamiento sino en el diagnóstico de la enfermedad y en la recomendación de medidas preventivas, donde se realizaron avances significativos al tomar conciencia de que era una enfermedad infección contagiosa. No se podía curar, pero si frenar su expansión. El instrumento era el establecimiento de cordones sanitarios que aislasen el foco de la enfermedad, asegurando esa incomunicación con los métodos más rigurosos. En los primeros momentos fueron tomadas por las autoridades locales, pero su efectividad creció cuando asumieron competencias las autoridades centrales de los estados. Se desarrollaron para controlar esos desplazamientos peligrosos una serie de medidas, como la práctica de exigir a los navíos que arribasen a puerto un certificado sanitario que certificase la procedencia de un puerto libre de infección. Luego esto se extendió al tráfico por tierra mediante juramento primero y con documentos certificados después. Pero no sólo fe la peste la que asolo estas tierras, otros agentes patógenos extendidos por la época, que causaron enormes estragos, sobre todo en América, fueron, entre otras, la malaria, el tifus, la sífilis, la viruela...

- Guerras (bellum): la violencia consumió muchas vidas, más indirectas que directas. El duelo y el derecho a la venganza parece que perdieron importancia a lo largo del s.XVI, así como las banderías nobiliarias, pero los ejércitos cada vez eran más numerosos, hombres jóvenes que van a combatir mueren o regresan mal y ya no vuelven a trabajar la tierra, propiciando la hambruna de sus familias o comunidades. Debemos destacar cómo los ejércitos de la época se bastaban para, sin necesidad del enemigo, registrar una alta mortalidad e infligirla a las poblaciones que atravesaban. Esas concentraciones humanas en condiciones lamentables de higiene, constituían un foco de enfermedades infecciosas (disentería, tifus, sífilis). Asimismo aportaban algo más que eso, ya que saqueaban las reservas alimenticias de la población, provocando hambrunas, alteraban la vida local y llevaban a situaciones extremas a las poblaciones con sus saqueos y pillajes.

Ordinaria: el país en el que mejor se puede analizar este tipo de mortalidad es Inglaterra, de donde tenemos datos más claros. Para la segunda mitad s.XVI, se habla de una esperanza de vida al nacer de cerca de 40 años, de una mortalidad infantil y juvenil que permitía llegar a los diez años al 75% de los niños, y solo 9,3 mujeres moría al dar a luz por cada mil partos. Son parámetros inusuales, pero como contraste tenemos Ginebra, donde el 50% de las defunciones corresponden a menores de 10 años, una mortalidad infantil que dobla a la inglesa, y apenas la mitad de nacidos que lograban llegar a los 10 años.
Había una esperanza de vida de entre 25-30 años, y una mortalidad infantil de entre el 150-350%, con excepciones. Cabe destacar un aspecto fundamentel, el dle impacto de esta mortalidad infantil y juvenil sobre la que incidían una serie de elementos difíciles de asir: atención al niño, alimentación sustitutoria, amamantamiento... superados los difíciles primeros años y alcanzar los 20 años, la esperanza de vida podía llegar a los 60 años. Ellos lleva a concluir que los cocientes de mortalidad infantil y juvenil son fundamentales a la hora de explicar los niveles de mortalidad general que se registran en cualquier sociedad.
Conviene destacar que en estos momentos los hombres tenían pocas enfermedades degenerativas, ya que solían morir antes por las infecciosas, con especial incidencia en la población infantil.









manu

hola

Memoria del Miércoles 24 de octubre

Durante esta semana hemos consultado varios libros. Hemos empezado por consultar manuales generales, para coger unas ideas globales sobre el periodo, ya que todavía no hemos concretado ni en que vamos a centrarnos más profundamente ni que estructura vamos a darle al trabajo.

En el manual de Alfredo Floristán (Hª Moderna universal), nos hemos centrado en el capítulo cinco, páginas correspondientes a Inglaterra en la primera mitad del s.XVI (pag. 133-143). Se nos da noticia de la estructura política de Inglaterra a principios de la E.Moderna y su evolución duranrte la primera mitad del s.XVI.
Compuesta por la Corte y el Consejo y la Casa Real, que recobrarán gran protagonismo e independencia con el reinado de Enrique VII, y una estrutura administrativa central, dividida en el "Exchequer", y tres secretarias mas por las que pasaban las órdenes del rey (Gran Sello, Sello Privado y Sello).
Tras la llegada al trono del rey Enrique VII, se comenzaron una seria de reformas, que comenzaron por la estructura del palacio en sí, de acuerdo con la nueva organización de la Casa Real, destacando la creación de las Cámaras en sustitución de la Cámara Privada. La evolución del Consejo y la Casa Real se resume en la concentración de poder en ambos polos, con disputa entre ellos por la influencia sobre el monarca, destacando la figura de T.Wosley, que tras sus intentos de hacerse con el poder de ambos organismos todo se le vino abajo con la llegada de la nueva reina A.Bolena, que fue el detonante y la que propicio la división en facciones de estos organismos tanto en el ámbito político (continuación de Wosley) como religioso (divorcio). Todo desembocó, tras la victoria española en Italia contra los franceses, en la caída de Wosley y que Enrique VII asuma el control directo del gobierno. En estos momentos apareció en escena T.Cromwell, que lleva a la práctica una serie de ideas: "estado soberano al que, aplicando el concepto de imperium, no reconociese autoridad superior". Lo que esto aporta es que ese "imperio" "podía ser representado por la legislación del rey en su parlamento, las actas", asique, liberadas las "actas del parlamento" de la limitación, esto dio como resultado tres actas que originaron la separación total con Roma (monarca cabeza de la Iglesia, juramentos de fidelidad hacia él, traidor él que lo considerase herejía). Tras todo esto, se empezó a gestar un complot por parte del sector conservador contra la reina A.Bolena, usando Cromwell a los conservadores para destronarla por otra, y cuando lo consiguió, se volvió contra los conservadores y María Tudor, consiguiendo acabar con la inlfuencia de estos y ejecutando a muchos de ellos, cercenando la facción de A.Bolena y eliminando casi por completo la rama conservadora. Pero esto no le duró mucho a Cromwell, ya que tras el fiasco del matrimonio del rey con Ana de Cleves, sus enemigos consiguieron que el rey le ejecutara.
Institucionalmente, el Consejo se fue transformando sobre unas bases formales (secretario propio, libro de registro...), llegando a convertirse en la Cámara Privada. En contrapartida, la nobleza que eliminó a Cromwell concentro su poder en el Consejo Privado, distinto del Viejo Consejo, compuesto casi en exclusiva por altos cargos, destacando los "grandes oficios del reino" (antigua Casa y oficios militares de los reyes normandos), que a mediados del s.XVI tras el "Acta de Precedencia" (1539), con fusionados todos estos oficios dentro de una sola categoría, pasando además en 1540 tras la reforma conciliar a formar parte del Consejo Privado. Estos dos centros de poder fueron foco de constantes disputas y complot unos contra otros, destacando sobre todo los del Consejo contra la Casa. El último intento de los conservadores de acabar con los miembros de la Cámara Privada, fue el complot en el que les acusaben de herejes, pero debido al nuevo matrimonio del rey, se vino abajo.
El final del reinado estuvo marcado por la lucha entre los conservadores, mal organizados para la lucha política y que contaban con mayoría en el Consejo Privado, y los "jóvenes", que contaban con apoyos en el Cámara Privada aunque no la dominaran por completo. Finalmente, aunque con aspectos bastante negativos, el proceso fue posible y el príncipe Eduardo paso a ser custodiado por Hertford y Dudley: los "jóvenes" triunfaron gracias al control sobre la Cámara Privada y el acceso al rey.
A la muerte del rey en 1547, le sucede Eduardo VI, sólo un niño, por lo que fueron sus regente el duque de Somerset y el duque de Warwick, en un periodo en el cual en un principio se siguió la política de Enrique VIII, pero que cambio con la segunda regencia con la reforma y la imposición de una nueva liturgia sobre la comunión.

Otra bibligrafía ha sido consultada más por encima, procediéndose a ser leída más profundamente a lo largo de esta semana. Los libros propuestos o que tenemos en la lista son: manual general de Tenenti; Hª Inglaterra, Hª Social de Inglaterra (E.L. Woodward); Hª Política de Inglaterra (Trevelian); Enrique VIII (Alison Weir);

También hemos consultado algunas revistas de divulgación en las cuales hemos localizado artículos sobre los protagonistas de esta época, mas centrados en su persona, y de los cuales creemos nos darán una visión bastante específica de cada uno de ellos. Las revistas consultadas son:

- National Geographic Historia (nº 22): artículo sobre Enrique VIII y sus matrimonios; se centra sobre todo en el ascenso de Cromwell; A.Bolena y su caída; un cuadro muy claro sobre sus respectivos matrimonios y consecuencias políticas, interesés y pequeño resumen biográfico de la misma; la cronología con las bodas y muertes o deposciones de las mujeres; reforma religiosa, con unos cuadros bastante útiles sobre el funcionamiento de la nueva religión asi como su comparataiva con las otros credos católicos y luteranos, diferencias y similitudes.

- National Geographic Historia (nº40): centrado en la figura de María Tudor; aunque puede que no lleguemos a esta centuria en el trabjo, lo hemos considerado ya que no deja de ser el desembocamiento de todo la política de la primera mitad del s.XVI, por no llamarlo una consecuencia. El artículo narra su tortuosa infancia, su negativa de huir con ayuda española del reino. Pero tras la muerte de A.Bolena, se alivia la situación, acercándose a la órbita de la nueva reina gracias al juramente hacia las nuevas leyes. Tras la muerte de su padre, y tras amenzas del Emperador Carlos V, se le permitió practicar la religión de su madre, y a la muerte de Eduardo VI, se la proclamo reina, despertando las esperanzas católicas. Se casó con Felipe II, con el miedo de los ingleses a verse inmersos en las guerras del Emperador Carlos V, pero fue aceptado. Este matriminio no le fue bien a María, ya que Felipe no la correspondía y tuvo que volver a España. Con todo esto se había restaurado el catolicismo, y Felipe volvió a pedir ayuda para sus guerras contra Francia, cosa que le fue conedida gracias a una coyuntura. Pero María no volvió a verle, y tras la pérdida de Calais, cayo en desgracia muriendo en 1558.

- La aventura de la historia (nº126): centrado también sobre la figura de Enrique VIII, mucho menos especifico que el de la revista anterior, artículo mas general y del mismo contenido solo que mas resumido.

- Historia y Vida (nº449): genealogía muy útil e interesante sobre los tronos de Inglaterra y Escocia, Tudor y Estuardo, sobre los respectivos matrominios, hijos... al artículo en general trata sobre María Estuardo y la rivalidad con Isabel I.

lunes, 19 de octubre de 2009

La Demografía en la Edad Moderna

Características Generales:

La demografía (de demos, pueblo, y grafos, escritura) es la ciencia que estudia los cambios poblacionales del ser humano.

La Edad Moderna posee unas estructuras muy estables, de pocos cambios, pero no inmóviles. Hay momentos de expansión (A) y recesión (B). Es una demografía de tipo antiguo: Alta Natalidad y Alta Mortalidad a la vez, creando una pirámida de población con algunos saltos, lo denominado "mortalidad catastrófica. La natalidad se halla en el 40 por mil; la mortalidad en el 35-40 por mil. Hay una leve tendencia al crecimiento vegetativo, cuyo avance destruido por las comentadas catástrofes demográficas, producidas principalmente por hambre, peste y guerras.
La esperanza de vida es corta, en torno a 40 años. Pero hay que tener en cuenta la elevada mortalidad infantil, que hace disminuir la estadística. Por tanto, en la realidad, las gentes podían vivir hasta los 60, con casos de personajes extremadamente longevos; de lo que no hay duda es de que el envejecimiento se producía antes que ahora.
Además de esto, tiene lugar una clara tendencia al crecimiento urbano, especialmente a partir del siglo XVII, que va a condicionar el comercio y la industrialización. Los países propicios para ello, dada la tendencia comerciante y mercantil, son principalmente Holanda (donde en 1609 se inaugura el Banco de Amsterdam) e Inglaterra (donde se crea la Bolsa de Londres), es decir, la Costa Atlántica, la que da al Nuevo Continente.

En el siglo XVI se calcula que hay 461 millones de habitantes en el planeta: 84 en Europa, 245 en Asia (donde impera indudablemente China) y 122 en lo demás. La población aumenta en el XVII en Europa, pese a la discutida crisis (gracias a los mencionados países), hasta incrementarse en el siglo XVIII de 125 a 195 millones de habitantes, una cifra que globalmente abarca un 20,4 % del total de seres humanos.

En esta época, pese a lo que se creía, hay cierta libertad de movimiento: emigraciones por motivos laborales y profesionales, como testifican algunos textos. Como es bien sabido, paralelamente van a tener lugar desplazamientos forzosos de judíos, moriscos, protestantes... hacia otros lugares de Europa, África o América.
También es momento de fuertez intercambios entre el campo y la ciudad, que tienen como protagonista al mercader.

Fuentes para el estudio:

Al haber una finalidad de recopilación únicamente militar y fiscal, no para el estudio de la demografía, se trata de fuentes escasas y poco fiables, con información inconexa e imprecisa. Muchas veces hay que rellenar vacíos con imaginación. Las primeras medidas son:
- Censos: Listas de vecinos (4 personas aproximadamente por cada vecino). Se realizaron en Nápoles (1508), Venecia (1509), Roma (1526), Francia (1503), Castilla (1587). Se aprecia el aumento y querencia de control por parte del Estado.
- Empadronamientos: Nómina de vecinos o moradores de un pueblo. Se realizaron enPrusia (1714), España (1717) y el Catastro del Marqués de la Ensenada, 1753, para conocer mejor Castilla.
Los primeros censos individuales modernosfueron en Aranda (1768), Holanda (1740), Suecia (1764), Dinamarca (1766) o el Censo de Floridablanca (1786). Con éstos ya hay posibilidad de calcular o realizar gráficos, pirámides, densidad…

Van a tener suma importancia los libros parroquiales, idóneos para reconstruir familias y hacerse una idea demográfica medianamente precisa. Son anteriores al Concilio de Trento (finalizado en 1563), pero se generalizan tras él. Tipos de libros:
- De bautismo: Anteriores a Trento. Sólo se recoge a los que llegan a ser bautizados.
- De matrimonio: Oficiales con Trento. Difíciles de ocultar por el control del clero sobre los matrimonios. A veces, tenían lugar negligencias por parte del párroco.
- De defunción: A partir de 1614. Con ocultaciones y falta de minuciosidad. A veces hay duplicaciones (en hospital y parroquia) que inducen a la confusión. Además, no se contabilizan las defunciones de pobres y se colapsan durante epidemias.

Natalidad:

Su porcentaje es de 40 por mil. Su estacionalidad abarca la primavera (por el relajamiento moral en la Semana Santa) y Otoño (tras el duro verano de trabajo agrario).
Existe una altísima natalidad ilegítima, especialmente en la ciudad dado el anonimato que produce el alto número de población de las urbes. Los hijos ilegítimos tuvieron duras dificultades para subsistir allá donde se movían, pues eran marcados de nacimiento.
En cuanto a la mujer, su matrimoni era tardía (algo anterior al del hombre, que era a los 25-30 años). Se tenían 4 o 5 hijos por familia, sin contabilizar los frecuentísimos abortos.

Nupcialidad:

Su porcentaje es de 11-15 por mil, bastante algo. Los mínimos estacionales se producían en cuaresma y navidades (por ser momentos de ferviente religiosidad) y verano (pro ser época de duro trabajo en el campo). El divorcio no existía.
En caso de viudedad, podían tener lugar unas segundas nupcias. Éstas eran mejor vistas en el caso del hombre, pues era el elemento engendrador de la sociedad patriarcal del momento; la mujer se quedaba encerrada en casa, vestida de negro, guardando luto por su difunto marido.
El celibato era frecuente en los religiosos, especialmente en los católicos. También había cierta cantidad de gente que no se casaba, siendo malmirada por la sociedad, que llegaba a acusarla de brujería (especialmente cuando se trataba de mujeres). Hay que tener en cuenta que en este momento el matrimonio no se concebía como amor entre dos personas, sino como un acuerdo político entre familias o individuos para repartir bienes.
Un elemento influyente fue también la emigración a América, a donde muchos europeos masculinos varones fueron en busca de hallar parejas y formar allí su familia, restando a la demografía del Viejo Continente.

Mortalidad:

Es obligatorio distinguir dos tipos:

- Ordinaria:

Su porcentaje es de 35-40 por mil. Su estacionalidad tiene lugar en verano (por la diarrea) e invierno (enfermedades pulmonares).
La enfermedad más mortal es la peste, enfermedad traída de Asia en el sigloXIV con la yersina pestis, bacteria de la pulga de la rata, que pasa al hombre con la mordedura de la rata o el insecto. Hay brotes periódicos, especialmente en las dos estaciones. Mata en cuestión de dos o tres días, una semana a lo sumo. Tipos de peste:
- Negra o bubónica: Salen bubones (granos morados grandes y malolientes) en varias partes del cuerpo. Tiene un50% mortandad e incide sumamente en verano.

- Pulmonar: Produce serios problemas respiratorios. Tiene 80-90% mortandad e incide principalmente en invierno.
Contraer ambas es casi un 100% mortandad. También había otras enfermedades extendidas por la época, que causaron enormes estragos, sobre todo en América. Éstas fueron, entre otras, la malaria, el tifus, la sífilis, la viruela...

- Catastrófica:

Consiste en un aumento de la mortalidad durante un período breve (200, 300, 400 por mil). Asemejada a los Cuatro Jinetes del Apocalipsis:

- Guerra: Las causas son más indirectas que directas: se trata de hombres jóvenes que van a combatir mueren o regresan mal y ya no vuelven a trabajar la tierra. propiciando la hambruna de sus familias o comunidades. Los ejércitos, además, se abastecían en los lugares por donde pasaban, dejando a su población autóctona sin víveres y matango de inanición parte de ella. El propio ejército era, junto a todo esto, fuente de infecciones de todo tipo, especialmente la sífilis, que diezmó los ejércitos europeos hasta época relativamente reciente.

- Hambre: La inanición se produce dada la economía de subsistencia, que no podía soportar el paso de ejércitos o plagas, y que estaba mercada escasez de transportes adecuados para comerciar o abastecer poblaciones.

- Enfermedad: Halla su caldo de cultivo en la mala alimentación, haciendo que las epidemias mataran a buena parte del pueblo. A esto se sumaba la común insalubridad, como en las ciudades, con los cementerios junto a las iglesias y la suciedad de las calles, y la falta de la propia higiene personal.

Introducción a la Historia Moderna Universal

Para estudiar esta disciplina, es necesario establecer unas fechas de inicio y final para diversas épocas, entendiendo que la historia es una sucesión de hechos cuya acotación es ficticia.

En el caso de la H. Moderna, el mundo latino la comienza en 1453 (caída de Constantinopla ante el Imperio Turco) y termina en 1789 (el inicio de la Revolución Francesa). Esta catalogación encuentra algunas diferencias dentro de algunos países, como el caso de España, donde se sitúa su inicio en 1492 (la llegada de Castilla a América) y su final en 1808 (llegada de Napoleón y la Revolución Francesa). En el mundo anglosajón, en cambio, se distinguen Early Modern History (siglo XIII - 1648) y Modern History (1648 - 1914), dado que el punto de cambio que ven desde su perspectiva histórica es la Revolución Inglesa.

La Edad Moderna se denomina también Antiguo Régimen. Este concepto fue acotado por los historiadores liberales, considerando al régimen imperante en la época como algo "antiguo", frente a la novedad que ellos representaban. Un concepto que, además, tiene claras connotaciones negativas. Los últimos estudios revelan una complejidad tanto en política como en economía, sociedad, ejército... diferentes a la visión de la época que se nos ha ido transmitida tras el triunfo de las ideas liberales.

Se trata de una época en la que no existen las disciplinas científicas convencionales, racionalizadas y separadas como en la actualidad, sino que forman un conglomerado donde la política no se entiende sin la religión o la economía, lo que explicará diversos hechos que trataremos en un futuro.


Ahora comentaremos los rasgos básicos de los distintos períodos en los que dividiremos el estudio de la Edad Moderna:


Siglo XV - Finales del siglo XVI

Se trata de un momento de recuperación demográfica y económica, al finalizar los grandes brotes de peste surgidos a mediados del siglo XIV y con el inicio de la explotación del oro africano. Va a ser el momento en el que se formen las monarquías europeas que condicionarán el resto de la época. Según algunos autores, estas monarquías no representan el sumo poder absoluto que tradicionalmente se les ha atribuido, sino que se entiende al rey como la cúspide de un complejo poder, cuya función sería la del arbitraje.

Una gran característica de la época es la del inicio de los grandes descubrimientos, en el afán europeo por llegar a las Indias, donde se hallaban las ansiadas especias. Los grandes ejemplos son África y América. Va a ser, para algunos autores, la primera globalización o First Global Age, entre ellos Wallerstein, el creador del sistema mundo que refleja las relaciones económicas entre países desarrollados y países dependientes.

Van a aparecer los nombres de archiconocidos personajes como Galileo, Servet o Gutenberg, promovedores de los primeros cambios científicos característicos de la Edad Moderna. Algunos van a confrontar con la religión cristiana, cuya unidad católica ahora se encuentra en tela de juicio. En este siglo aparecen los anglicanos, cristianos que no creen en la autoridad del Papa; luteranos, que reniegan de diversos dogmas de la Iglesia y crean la suya propia, más "abierta", y calvinistas, que creen en la predestinación, reflejada en cómo transcurre la vida terrenal.

Todo ello acaecerá bajo el impero indiscutible de la corona Austria, una vez herede Carlos I un vasto imperio. Será el modelo de toda monarquía coetánea.


1570 / 1580 – 1680:


Se trata de una época de crisis para algunos historiadores, pero no para todos. Se habla de una pequeña edad glacial que va a atraer dificultades demográficas y económicas traducidas en guerras, hambre, peste... La oposición a que sea una crisis encuentra sus principales argumentos en que se trata de un período de esplendor para Holanda e Inglaterra, que proliferan a la vez que muere la hegemonía española.

Es, además, el período en el que tiene lugar la Revolución Científica, proceso con trayectoria anterior, protagonizada en este momento por personajes como Kepler, Brahe, Copérnico, Newton... Van a cambiar la concepción del mundo radicalmente: introducen la objetividad, comenzando a usar medidas no cualitativas.

El enfrentamiento decisivo, tras muchos otros, a raíz de la ruptura religiosa va a ser la Guerra de los Treinta Años, entre 1618 y 1648, que tiene cotas de guerra total europea. Cambias las relaciones internacionales completamente, y da a Francia la nueva hegemonía, encarnada en la figura del rey Borbón Luis XIV. Su modelo es el conocido como "absolutismo", término actualmente en revisión, pues parece que era limitada. Con él, surgen nuevas ideas de poder que se extienden por Europa.


1680 – 1789:


Momento de nueva recuperación demográfica y económica, pero permaneciendo inermes las estructuras económicas básicas.

Van a coexistir en la Europa del momento dos modelos estatales de monarquía: el absolutismo, que se muestra como despotismo ilustrado, y la monarquía parlamentaria, surgida en Inglaterra, que innova los representantes y nuevos modelos económicos.

Esta época va a finalizar con el Ciclio Revolucionario que se inicia en el último tercio del siglo XVIII, en EEUU (1776) y Francia (1789).


Características generales de la Edad Moderna:


La Edad Moderna puede verse desde diversos ámbitos:

- Cultura: Se basa en Renacimiento, Barroco, Ilustración. No puede entenderse como una ruptura el paso de una a otra, pues son homogéneas y algunos periodos son visibles en obras de décadas posteriores a su final convenido.

- Economía: Se califica como "precapitalismo". El predominio va a seguir siendo el tradicional agrario. Posee una demografía antigua, consistente en Alta Natalidad y Alta Mortalidad.

- Sociedad: Estamental, estática y jerarquizada, con enfrentamientos sociales. El dinero comienza a cobrar suma importancia.

- Política: Se aprecia el transcurso lineal de la monarquía autoritaria hasta el absolutismo, y más tarde la convicencia del despotismo ilustrado y la monarquía parlamentaria.

- Religión: Es de suma importancia para toda relación de cualquier tipo. Se apoya en la cristiandad, que sufre su ruptura.